Hace un par de meses, Julio, el papá de Rosaida (mi mejor amiga y dama de honor), me dijo que preguntara a todas las personas divorciadas que conozco por qué se divorciaron, para que "mi futuro" y yo no usemos las mismas excusas. A partir de ahí empecé a ver el lado no tan felíz de la convivencia en pareja.
Tanto los casados como los divorciados coinciden en que el matrimonio no es fácil, pero más que el motivo del divorcio, me preocupan más los que deciden dar ese paso tan importante y luego hacen de ese compromiso un relajo.
Da pena ver como algunos se acomodan en la excusa de que "Ella me conoció así" para justificar sus infidelidades. Pero si ellos son malos por hacerlo, también son malos sus familiares y supuestos amigos quienes, aún sabiendo lo que puede provocar esa falta de respeto, no hacen ni dicen nada o peor aún, lo apoyan. También rayan en estúpidas las mujeres que saben lo que hacen sus esposos y símplemente no hacen nada por el famoso "qué diran".
Entonces me pregunto... para qué casarse??? Para dedicarse en cuerpo y alma a destrozar lo que con amor se ha iniciado? Para "aguantar callao" las infidelidades?? En serio??
Este fin de semana me ayudó no solo a reflexionar, sino también a darme cuenta de que lo único verdadero y duradero en la vida se construye sobre la roca y esa roca es Dios. Los matrimonios más sanos que he conocido (claro, con sus problemas como los demás) son los que tienen a Dios como guía y fundamento.
Mi problema es que no soy la más cristiana ni "mi futuro" tampoco lo es. Pido mucho a Dios por nuestro matrimonio y espero que en algún momento podamos conocer Su gracia y dedicarnos a Él.
1 comentario:
El papá de tu amiga ha dado en el clavo: precisamente por ese relajo de justificarse luego del matrimonio es que muchos terminan en divorcio. Incluso date cuenta que los divorcios están ahora en el diario vivir que 40 años atrás. Que diez de las parejas que se casaron 10 años atrás, siete están separadas o divorciadas. Eso de la excusa de "Ella me conoció así" no se incluye con ellos. Imaginate que tu no sepas cocinar ¿Es tu excusa de "él me conoció así"? Noooo para nada. Tanto tu madre, como suegra y hasta abuelas, hacen lo imposible por ponerte en "onda" con los deberes domésticos y hasta se te ofrecen para enseñarte a cocinar.
El matrimonio además de Dios, debería estar sobre los pilares de la honestidad. Las mujeres debemos de comprender que si conocemos el hombre como mujeriego, mujeriego se queda. No creer que ellos se quedan tranquilos solo porque tienen una sortija en el dedo y que hicieron unos votos delante de un sacerdote o un juez. Ellos creen que "la sociedad" Se los perdona mas fácilmente y por ello las mujeres debemos de aguantarselo.
Siempre he dicho "Si soy honesta, me deben honestidad". Si saben que las cosas andan mal, buscar una alternativa para solucionar pues a través del dialogo hasta las guerras han terminado en el mundo. ¿Por que debe de ser diferente en el matrimonio? El silencio o dejar que las cosas se enfríen no es nunca la mejor forma de buscar una solucion.
Saludos Adriana y tremendo post ;-)
Moni Hernandez T.
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